viernes, 13 de junio de 2014

Una especie de RR

El año pasado termine los treinta-y-tantos de Putaendo con la sensación de haber hecho todo mal. Este año me había prometido entrenar como correspondía para este circuito y correr los sesenta-y-tantos de la mejor manera que pudiera.

Lamentablemente, cuando llevaba dos semanas de entrenamiento sólido (quizás demasiado sólido) me vino una Periostitis que prácticamente me dejo unos 12 días sin poder correr como la gente, aunque mirando en retrospectiva: la saque barata. Si bien hasta pude trotar alguno de esos días y andar en bicicleta, como ya he dicho antes; es injusto lo rápido que uno pierde la forma…pero so it goes.

Cuando ya podía notar mejoras en mi pierna, solo quedaban 2 semanas para la carrera y mi indecisión de si estaba o no en las condiciones aptas para siquiera dar la vuelta digna rondaban por mi cabeza. Luego de un buen fin de semana con Moi en STGO, ya había tomado una determinación: correría y lo intentaría disfrutar como un buen entrenamiento. Por lo demás, habría que ser bastante estúpido como para  perderse la última carrera del semestre, que más encima, este año prometía con un circuito renovado.

Ahora viene la parte donde cuento mi carrera y que chucha me pasó o pensé mientras corría los brígidos senderos de Putaendo:

-Partí encajonado en la mitad del pelotón. Cagado de frío. A los pocos metros decidí apretar un poquito para entrar en calor y ver si podía alcanzar a los que ya se habían consolidado como ‘el grupo de punta’. Luego de alcanzarlo, alcanzamos a “echar la talla” con Moi,  Pepa y Fernando mientras atravesábamos las callecitas del dormido Putaendo. Entre las principales tallas (y las que se pueden contar acá) estaban; lo ridículamente rápido que había partido el primero (Emanuel Acuña) y lo difícil que es perfeccionar el arte de “mear-on-the-fly”. (compartí todos mis tips con Pepa)

-Cuando salimos de la ciudad empezaba el sendero y empezaba la obscuridad completa, así que por mi decisión de no salir con frontal, no tenía mucha más opción que quedarme con alguno que tuviera una linterna poderosa. Ese resulto ser Fernando. La verdad esos minutos antes de que saliera el sol fueron una verdadera delicia. Apenas mis ojos empezaron a ver las piedras del camino -sin la necesidad de la luz artificial-  no la dude mucho y pegue un batatazo a ver si alguien me aguantaba. Resulto que nadie me siguió.

-Ya había visto alejarse a Moi con Lucho y desde lejos pude ver como Moi hizo exactamente lo mismo con él apenas salió el sol. Para ese entonces ya sabía que iba 5to y la verdad, me sorprendió que nadie del grupo se atreviera a empujar un poquito más el ritmo en la primera subida del día y eso que yo me considero bastante conservador en ese sentido. Llegando arriba veo a Luis y lo noto un poco complicado trotando. Me acerque lentamente hasta que decidí cortar el mariconeo y lo pase deseándole suerte y con un: ”nos vemos más rato”.

-1er abastecimiento y con toda la calma del mundo me como unos plátanos y me tomo unos  vasos de agua. Me sorprendió –de verdad- que nadie viniera pisándome los talones a pesar de haber venido bastante relajado hasta acá. Bueno pensé: “mejor seguir moviéndose que el día será largo”.

-Bajando por el camino donde el año pasado se-fue-todo-a-la-chucha, me alcanzo Luis y alcanzamos a compartir un par de kilómetros juntos. La verdad no tenía ninguna intensión de correr solo, así que la compañía me caía más que bien. Cuando empezó el falso plano Luis de nuevo se fue quedando atrás y yo decidí seguir trotando a ritmo-tranquilo-pero-parejo hasta que la pendiente ya no diera más. Resulto ser que parece que todo el entrenamiento de “correr más y caminar menos” resulto, por qué no me costó mucho trabajo llegar corriendo hasta el abastecimiento.

-KM20 y algo y ahí estaba Matías. Pocas cosas son tan buenas como ver a un amigo en un abastecimiento. Preguntándole si Moi había cazado ya a Emanuel, Mati me dijo que todavía había una buena diferencia y que de hecho solo habían unos 5 o 6 minutos entre Moi y yo. Después de abastecerme con toda la calma, seguí trotando y caminando solo cuando el barro-tipo-greda se ponía muy pajero.

-El tiempo se me paso realmente rápido. A veces miraba para atrás con la esperanza de ver a alguien pero ya desde este punto nunca más vi a nadie, ni adelante ni atrás. Acá comenzó mi travesía en solitario por el Orolonco. Llegue a los pies del cerrito bastante decente, pero sin la chispa o la motivación por empujar a fondo en la subida.  El frío se empezaba a sentir y ya me estaba preparando sicológicamente para lo que se venía arriba mío: el filo del cerro. Con algo de experiencia en esto, estaba bien seguro que la meseta arriba del cerro iba a estar DE PERROS. Cuando llegue arriba confirme  esto y solo me preocupe de moverme lo más rápido posible cosa de mantenerme en calor y además, salir lo antes posible de ahí.

En la mitad de la subida del Orolonco...cuando todavía no hacía frío. FOTO: Organización
-Empezando la bajada me vino un mariconeo extraño. Como no sentía los pies, me pase el rollo que podía pisar una piedra y doblarme un tobillo o hasta cortarme el talón de Aquiles (jaja) y definitivamente ese no era un lugar donde me hubiese gustado quedarme botado. La verdad, recién empecé a disfrutar la bajada cuando fui recuperando algo de sensibilidad en mis extremidades, que no fue hasta harto rato después de comenzar a bajar.

-Llegando al  4to abastecimiento (algo así como el KM35 me dijeron) llegue más desesperado por pedir confort que por cuánto tiempo me tenían los de adelante. Aproveche  de des-abrigarme un poco y seguí con mi día. Cuando estaba llegando al final del camino ancho, me cruce con la familia de Luis y Martín. Yo juraba que Luis me iba a pasar volando por este camino, pero cada vez que giraba la cabeza parecía que más ventaja iba sacando. Ahí me dí cuenta de que iba a ser imposible pillar a Moi o Emanuel. Sencillamente no tenía la marcha para andar al ritmo que anduvieron estos dos.

Acá ya había recuperado mi sensibilidad en ls pies jaja. FOTO: Organización

-Todavía con bastante energía y positividad, llegue hasta ese segundo camino ancho y falso plano que marcaba el tramo final para llegar al último abastecimiento de la carrera. Ya me estaba quedando sin agua y tenía algo de apuro en llegar, así que le puse un poco de color. Me acuerdo que mi reloj marcó 6h08. (Se supone que era como el KM50, aunque yo creo que era más bien como el 52-53-54).

En el último abastecimiento, todavía de buen animo.

-Acá fue cuando la cosa se puso un poco confusa. Me dijeron que tenía que devolverme por donde habíamos venido en la mañana (este abastecimiento lo hacíamos dos veces) y yo me acordaba que según la ruta, teníamos que bajar hacia el otro lado del valle para remontar por la ruta de los 30k hasta la meta. Bueno, “chao” pensé yo. Habrá habido un cambio de planes y listo. Sin sobre-analizarlo emprendí hacia la meta pensando que me quedaban 10kms. Ya estaba bien seguro que nadie me iba a pillar. Pero de todas formas quería darle un esfuerzo real a los kilómetros finales, lo cual hize ya que corrí bastante decente por TODOS los toboganes hasta el final del sendero y eso que ya llevábamos un tiempo considerable-usando las piernas.

-El día estaba resultando redondito. Ningún momento malo durante toda la carrera (lo cual es bastante extraño en mi experiencia). Pero obvio, al igual que en la vida, nada nunca es perfecto. Llegando a una bifurcación -donde ya se veía la ciudad de Putaendo- decidí tomar hacia la derecha (ruta de los 14k) y a los 4 o 5m de ir por el sendero me dije: “Hey weon, no creo que sean tan maricones de hacernos darnos tremenda vuelta para llegar al camp, hay algo malo aquí”. Además,  “si sigo por este camino seguro que termino haciendo 75kms y si bien Pablo siempre se pasa…nunca tanto” (jajaja). La cosa fue que decidí darme media vuelta hasta llegar a los pies del cerro “de las antenas” (que es por donde habíamos bajado en la mañana). Subí el cerro con algo de frustración, pensando que había desperdiciado preciosos minutos para cruzar la meta, pero llegando arriba del cerro me olvide y dije bueno: “cosas que pasan supongo”. En eso estaba cuando al parecer, me perdí la salida que correspondía hacia la ciudad y seguí por el camino (sorteando vacas y mas barro del que me acordaba) para llegar, nuevamente a los pies del cerro que recién había subido. “QUE PEDAZO DE IDIOTA”. Ahora si que ya estaba frustrado. Emputecido, decidí mandar todo a la chucha y buscar la manera de entrar a la ciudad de la forma más corta posible. Entre preguntar a unos lugareños y analizar donde estaba parado, termine saliendo por una calle pavimentada donde -por fin- pude darme cuenta  donde estaba.

-Llegue a la avenida principal con una cara de 7 metros y desmoralizado completamente. No voy a mentir; uno de mis traumas es perder un lugar a pocos kilómetros de la meta, (Todavía tengo pesadillas con Daniel pasándome como una aplanadora quitándome el 1er lugar en la Ruta del Cóndor y el 'incidente' en PIM 2013). Nunca he negado la parte egocéntrica que me produce este deporte y sin bien, no partí la carrera con el objetivo de subirme al pódium, luego de tantas horas no quieres que alguien venga a robarte la torta al final. Anyway, llegue a la plaza con una tormenta en mi cabeza pero con piernas y energías para correr fuerte. La gente me miraba con cara de “que chucha hace este weon acá” o “cabrito, la carrera es por otro lado”. Antes de llegar a la esquina que marcaba la entrada al CAMP, estaba Ara.  Creo que lo primero (y lo único) que le pregunte fue: "cuantos weones de 60 han llegado?" Me respondió: solo dos. Mi orgullo podía estar tranquilo jaja.

La sonrisa de la que hablaba. FOTO: Matias Bull

-Que carreraza fue Putaendo 60k (aunque según mis cálculos termine haciendo unos 68-70). Que ritmo del demonio metió Ema y Moi que después supe; se fueron tirando palos gran parte de la carrera. Que lindo que es este deporte CTM.

Race Gear:

-Polera y Short "Better Than Naked" TNF
-2da Capa "Isotherm"
-Arm Warmers TNF
-Single-Track Hayasa II
-UD AK Vest.

5 comentarios:

  1. Great race report Maxito!! Sorry about the nightmares from Ruta del Condor... Who would have thought I could catch you on a descent (albeit non-technical)! A well managed race and a great result to show from it.

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  2. A veces cuando no lo esperamos las cosas se dan, por diversos factores, y esto gratifican más!.
    es motivador tu amor por correr día a día,
    sigue soñando y buscando nuevos desafíos. (never stop exploring).

    besos MK

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  3. Buena viejo me cague de la risa con tu RR buen trabajo en la carrera a fierro pelao. un abrazo

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  4. Grande Max!!! Le pones talento y pasión, muy buen relato.
    Esperamos seguir mejorando para el 2015!!!
    Un abrazo,
    Pablo.

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  5. Thanks for including the race equipment Max - I would definitely get some TNF kit based on your recommendation. Hopefully we can see you racing on some of the international TNF races soon!

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